Es de ley que ya que he confesado que envidio al Piojo, confiese las razones por las que envidio a mi otro cuñao, PlayMaster.
Este cabroncete es el hermano de La Mary y lo envidio principalmente por tres cosas: por los huevos que tiene, por haberse realizado laboralmente y por ser la parte no ahorrativa de la pareja.
Huevos los que hay que tener para hacerse un tatuaje de Atari en la muñeca, pa tener toda una habitación llena de consolas, videojuegos, comics y películas y para tener un sofá-cama en el dormitorio porque es más importante jugar a la consola que dormir. Lo envidio.
Luego, ha tenido la puta suerte de dar con su trabajo ideal. ¿Donde? Pues en una tienda de videojuegos. Y claro, el tío se toma su trabajo muy en serio, y la verdad es que es muy bueno, y como se lo gana, pues venga ascensos y pasta gansa. Lo envidio.
Y para colmo, es la parte no ahorrativa de la pareja. Como todos sabeis, el equilibrio económico de una pareja se basa en que una de las partes (la ahorrativa) intente a toda costa ahorrar el dinero que la otra parte (la no ahorrativa) se empeña en gastar. En la mayoría de los casos la parte ahorrativa es el hombre, pero en el caso del Play ... Como lo envidio!!
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